Estas son las 3 lecciones que he aprendido de trabajos de mierda
Los trabajos de mierda deberían formar parte del currículum para la vida adulta.
En mi opinión personal todo el mundo debería trabajar por lo menos una vez en un trabajo de mierda. Este tipo de trabajo da grandes lecciones vitales que no se aprenden hasta que no se experimentan. Los trabajos de mierda pueden ser unos de los más influyentes en la carrera profesional.
Estas son las 3 lecciones que he aprendido de trabajos de mierda:
Lección #1. Valoras cada euro que que ganas.
Los trabajos de mierda se caracterizan por pagar poco y ser duros. Cuando ves el esfuerzo que tienes que poner y el tiempo que te consume tu cabeza hace un click y empieza a valorar cada euro que ganas
Lección #2. Sabes lo que no quieres hacer
Hacer un trabajo que no te gusta te da una información valiosa. Puede sonar obvio pero sabes exactamente qué es lo que no quieres hacer. La próxima vez que busques trabajo sabras los trabajos a los querrás aplicar
Lección #3. Pone a prueba tus límites
Aprender de algo que odias hacer pone a prueba tus límites. Sabes hasta donde puedes llegar, desarrolla tu resistencia.Un trabajo de mierda pone a prueba tu resilencia
Valorar cada euro que se gana, saber las cosa que no quieres hacer y poner a prueba tus límites son lecciones vitales que no tiene precio. Todo el mundo debería pasar por un trabajo de mierda para aprender a valorar lo que es un buen trabajo.
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